CONSIDERA
la “Operación Púnica”, abordada por la Audiencia Nacional como una
muestra más de la deplorable situación de nuestra democracia y del
Estado surgido de la Constitución de 1978, ciclo histórico en el que la
constante ha sido la corrupción.
RECUERDA
que en este nuevo escándalo han resultado, de momento, detenidas
cincuenta personas, entre ellos cinco alcaldes y altos cargos, la
mayoría del PP, cuando todavía no ha concluido la instrucción del Caso
Gürtel. Los detenidos pertenecen a las comunidades de Madrid, Valencia,
Murcia y León, todas ellas gobernadas por el PP desde hace varias
legislaturas.
PIDE
a los electores del PP que abandonen esta opción y reconozcan que la
corrupción, la falta de liderazgo, la incapacidad para enderezar el país
se han convertido en rasgos características de esta sigla, tan
salpicada por escándalos de corrupción como el PSOE (EREs de Andalucía) y
CiU (Caso Pujol como guinda de un amplio pastel de corruptelas).
PROCLAMA
que estamos asistiendo a los estertores terminales de un sistema
político que se está desplomando ante nuestros ojos y que este caso,
como el escándalo de las tarjetas black de Bankia, el Caso Pujol, el
referéndum soberanista catalán, la incapacidad para salir de la crisis
económica, el desprestigio de las formaciones tradicionales, el entierro
progresivo del Estado del Bienestar, el hundimiento del sistema
educativo, la inmigración masiva e innecesaria, la corrupción
generalizada, la ineficiencia ante el tratamiento de los problemas
reales, el paro institucionalizado, todo ello, incluido esta nueva
operación contra la corrupción, no son más que aspectos parciales de un
mal único cuyo común denominador es la crisis del sistema político
nacido en 1978.
LLAMA a
los ciudadanos a integrarse en las filas del patriotismo social y a
abandonar y condenar de una vez por todas, a las siglas que han
conducido a España hasta la crisis en la que nos encontramos en este
momento.